La quinta noche del Festival de Viña del Mar 2019 estará marcada por la actuación de la boy band Backstreet Boys. El grupo regresó a la Quinta Vergara después de 21 años, y desató una euforia pocas veces vistas en el escenario. Una presentación marcada por sus grandes éxitos, y que tuvo la nostalgia como aliado, desató la locura desde el comienzo. Los premios llegaron como pocas veces se pidió en este escenario.
Más tarde fue el turno del humorista Mauricio Palma. Con un humor ácido e inteligente, el psicólogo se las arregló para enfrentar un público hóstil que esperaba aún el retorno de Backstreet Boys. Finalmente se impuso a los nervios y el miedo, y se llevó la Gaviota de Plata.
El último turno de la noche fue para Camila Gallardo. La única intérprete chilena en esta edición demostró un aplomo y una carrera consolidada. Lamentablemente mucha gente se había ido a esa hora de la Quinta Vergara, sin embargo, los que se quedaron disfrutaron de un show completo y de alto nivel.